PP & CIUDADANOS; SUSANA MARQUES & CRISTINA FERNANDEZ. UN PORVENIR TRISTE PARA BENICASSIM.

En los primeros meses de este mandato ya ha aflorado lo que este Pacto que gobierna en Benicàssim nos va a traer, desorden e ineficacia por no calificarlo de discusiones en un gallinero.
A bombo y platillo los concejales de Ciudadanos anunciaron que se tomaban tres meses para pactar un “plan de gobierno”, mientras que la Alcaldesa no se cortaba en anunciar que no habría más programa que el del partido popular, con más propiedad debiera decir el suyo, ya que los demás concejales de su grupo tampoco pintan nada.
Esta Pacto ente Ciudadanos y PP se nos mostraba difícil ya que tantas veces habíamos oído a Cristina Fernandez que nunca pactaría con Susana Marqués, mas, “poderoso caballero es don dinero” y sin llegar al pacto de gobierno sí que llegaron a un pacto económico de sus sueldos, que acertadamente un concejal de la oposición lo calificó como “pacto del money-money”, con lo cual los benicenses pasábamos a pagar el sueldo a dos alcaldesas y el resto de concejales de Ciudadanos tendrían una dedicación del 80% de la jornada y cotizaciones a la Seguridad Social, ¡Nada importa, paga el vecino!.
Pese a que este reparto de dinero parecía que iba a suavizar las relaciones, esto no ha sido así, en el Pleno del día 27 de septiembre la alcaldesa se llenaba la boca, insultando a Javier Alonso y llamándole tránsfuga. ¿Se imaginan este ambiente dentro de un equipo de gobierno?
Pero no ha sido la única llamada de actuación, en otros Plenos y en otras votaciones el equipo de gobierno ha votado dividido sin sonrojarse por el espectáculo que están dando al pueblo de Benicàssim.
¿Qué podemos esperar los próximos 4 años de desarrollo para nuestro pueblo? ¿Creen que se van a afrontar los grandes retos que tiene Benicàssim? Limpieza, aguas, mantenimiento de calles,… ¿Creen que van a conseguir relanzar el turismo y evitar que degeneren los festivales musicales que tanta fama nos han dado? Desde la oposición creemos que va a ser un tiempo destinado a luchas intestinas, a repartos económicos, a intentos de ser más visible que el compañero del equipo de gobierno, a zancadillas retirando presupuesto de las concejalías del partido contrario, en fin, un desastre. La preocupación por la estabilidad interna y salvaguardar el sillón va a ser superior a solucionar los problemas de Benicàssim.
Ya lo saben los benicenses, sueldo a dos alcaldesas y un descontrol total.